16 jun 2008

La secretaría de exteriores mexicana dio trato de VIP a la ODCA

Lydiette Carrión

La lista de solicitudes para uso de las salas oficiales en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México en 2007, revela que la Secretaría de Relaciones Exteriores tramitó que los integrantes de la Organización Demócrata Cristiana de América (ODCA, que aglutina a la derecha política del continente, y es presidida por Manuel Espino) fueran tratados como invitados VIP durante su llegada y salida de México y tuvieran acceso a salones diplomáticos.

La petición al aeropuerto fue hecha por Lorena Larios Rodríguez, directora general adjunta para Misiones Extranjeras de la Cancillería, para la llegada y salida de la ODCA en enero de 2007.

La SRE no solicitó, en cambio, esta “atención” a los asistentes de actividades organizadas por el Partido de la Revolución Democrática, como el evento “Así gobierna la izquierda”, realizado en octubre de 2007, y a la cual llegaron funcionarios y dirigentes de países como Cuba, Venezuela, Bolivia, Chile, Brasil, entre otros. Tampoco para eventos del Partido del Trabajo.

En otros casos, como las reuniones del Parlatino (el parlamento latinoamericano), al que asistieron senadores de diversos países de la región, fue el Senado de la República y no la Cancillería el que solicitó la atención.

Incluso, durante la visita de embajadores extranjeros, no en todos los casos la Cancillería hace el trámite. Muchas veces son las embajadas extranjeras las que realizan el trámite.

Al preguntar en Cancillería cuál fue la base para tramitar el trato “VIP” a la derecha del continente, la respuesta no oficial fue que la SRE puede pedir este trato en el caso de organizaciones internacionales. Pero no aclaró que en el manual del uso de salones oficiales del aeropuerto, las llamadas “organizaciones internacionales” son organismos como la o­nU, la UNESCO, etcétera, y nunca organizaciones políticas o religiosas. Por ejemplo, en el caso de ministros de culto religioso, sólo lo pueden tramitar los dirigentes más altos. En caso de partidos políticos mexicanos, sólo lo puede hacer el presidente de un partido político. En resumen, no había justificación legal para que la ODCA recibiera trato VIP en el aeropuerto y mucho menos que lo tramitara el gobierno mexicano.
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