¡Tierra, vivienda y libertad!

Hoy lunes 14 de julio, hubo protestas en el D. F., Guadalajara y Monterrey para exigir la libertad inmediata de los presos y presas encarcelados en el penal del Topo Chico en el estado de Nuevo León: Gabriela Bautista, Alicia Gutiérrez, Juan Balderas, Gerardo Armendáriz y Josué Obed Juárez.

32 colonos de Nueva Castilla, incluso mujeres, hombres, niñ@s, jóvenes y ancian@s fueron detenidos el 16 de mayo en un violento operativo ordenado por el gobernador Natividad “Nati” González Parás. Los colonos estaban recuperando sus viviendas de las que habían sido desalojadas anteriormente en el área conurbana de Monterrey y se suponía que los protegía un amparo.

Debido a la presión pública, 27 de los colonos fueron liberados, pero de manera provisional. Mientras tanto los cinco quedan detenidos en una obvia maniobra para presionar a los colonos de Nueva Castilla a desistir de defender sus viviendas y aceptar el ingreso de los desarrolladores. El gobernador justifica el despojo y la represión con el pretexto que necesita los terrenos para construir vivienda de interés social mientras calumnia a los cinco detenidos como “líderes corruptos”.

Los manifestantes exigen la devolución de los terrenos que les arrebataron a los colonos de Nueva Castilla y resaltan que los desarrolladores y compañías de construcción son las mismas que pretenden destruir la reserva natural de la Huasteca con la colaboración del gobernador, imponiendo el proyecto Valle de Reyes o el Arco Vial Sureste.

Acusan al gobernador de cerrar la radio comunitaria Tierra y Libertad el pasado 6 de julio para silenciar la protesta y seguir con su despojo, represión y negocios sucios. Exigen su destitución y un fin a la impunidad.
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Un revolucionario es, sobre todo, un humanista, alguien que apuesta al libre desarrollo de la personalidad, y que reconoce en la revolución el medio para construir las condiciones de la libertad.